La quiropráctica aporta un cuidado no intrusivo y seguro que localiza y desbloquea las interferencias en el sistema nervioso, alojado en la columna vertebral, que son las principales causantes de malestar, permitiendo al cuerpo restaurar así su funcionamiento óptimo, de forma natural. No utiliza medicamentos ni realiza intervenciones quirúrgicas por lo que se puede aplicar a todos los individuos sin importar los síntomas que presenten.
En la actualidad, en España, la Quiropráctica cuenta con la aprobación del Ministerio de Sanidad y la AEQ, Asociación Española de Quiropráctica, de la que el Centro Quiropráctico de Valladolid es miembro, se ocupa de asegurar cuidados quiroprácticos de calidad ejercidos por profesionales cualificados.
¿Qué cuida?
El sistema nervioso que parte de nuestro cerebro y controla la correcta función del cuerpo humano, está alojado en la columna vertebral: cualquier disfunción en ella, puede provocar síntomas muy molestos en aquellos músculos, órganos y tejidos asociados con los nervios afectados. Para cumplir su cometido, el doctor Quiropráctico detecta y corrige la posición de aquellas vértebras desalineadas en la columna vertebral (denominadas Vértebras Subluxadas o Subluxaciones vertebrales) las cuales, al no estar en su posición correcta, causan interferencias en el sistema nervioso y su consiguiente malestar.
¿Cómo lo corrige?
Todas aquellas correcciones que realiza el profesional quiropráctico se denominan Ajustes Vertebrales, y se realizan mediante la aplicación controlada y precisa de presión en varios puntos de la columna. En ocasiones se produce un chasquido al realizar estos ajustes, el cual se debe al desplazamiento de gases y líquidos en las articulaciones vertebrales y no denota efectividad del cuidado, ya que en ocasiones ni siquiera se produce.
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